Personalmente me sorprendió la respuesta del gobernador CUAUHTÉMOC BLANCO BRAVO al tema de la eventual candidatura del subsecretario de Gobernación RABINDRANATH SALAZAR SOLORIO, al gobierno de Morelos.
Me sorprendió por varias razones, sobre todo, porque a pesar del tiempo y de las demostradas ocasiones que no es el de Jiutepec el generador de conflictos a Morelos y al gobierno de Cuauhtémoc, perviven algo de polvos de aquellos lodos.
Algún día no muy lejano, esta columna se dedicará a enumerar las veces que el FALSO PROFETA, también conocido como HUGO ERIC FLORES, fue el instigador del conflicto y encono entre los personajes, al hacer uso su capacidad para mentir, engañar, envolver y jugar con la buena voluntad de las personas. Antes que temprano este sujeto pisará los suelos del infierno de donde no saldrá jamás.
La respuesta agreste que CUAUHTÉMOC da la pregunta de una reportera, es entendible por varios puntos, pero no se si pueda considerarse justificada o válida. No obstante, no debemos dejar de lado las siguientes consideraciones
1.- Yo no he leído o escuchado que sea el ex alcalde de Jiutepec el que “ande diciendo” que él será el candidato a gobernador. Son sus seguidores, te eventualmente sus detractores los que difunden la versión.
2.- La pregunta planteada traía dolo y tenía toda la intensión de hacer explotar la personalidad del ex seleccionado nacional y “sacar nota” a partir de las respuestas. Lo cual es un acierto desde el punto de vista periodístico, eso si.
3,- Y, finalmente. En la praxis política, sea el gobernador que sea, ningún mandatario va a permitir, a menos frente a los demás, y con la personalidad de CUAUHTEMOC que le digan que le van a imponer algo, y menos a su sucesor.
Ahora bien, esas consideraciones y menos la respuesta del mandatario van a definir lo que pase en Morelos, pues es claro que ni por RABIN ni CUAUHTÉMOC va a pasar la decisión. Ellos sólo la recibirán y tendrán que apechugar.
Además, difícilmente va a repetirse lo del 2018 cuando a un partidito le dieron la chance de manotear en la mesa, de imponer, chantajear y condicionar, así que no quedará otra mas que esperar para cotejar que la determinación vendrá de la oficina principal de Palacio Nacional por lo que debe prevalecer la MESURA y EL CÁLCULO.
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