De acuerdo a los últimos informes de actividades emitidos por el Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Morelos (TJA), entre el 2017 y lo que va del 2018, se logró reducir el rezago en juicios administrativos en la entidad, lo que derivó en el incremento en el número de resoluciones definitivas a favor de los justiciables de Morelos.
Desde el pasado 2015, una reforma al Poder Judicial vio nacer el Tribunal de Justicia Administrativa que venía a suplir al hoy extinto Tribunal de lo Contencioso Administrativo, y se convierte en un órgano jurisdiccional fundamental para el funcionamiento del Sistema Estatal Anticorrupción.
De acuerdo a los números de la quinta sala especializada en responsabilidades administrativas que encabeza el magistrado Roque González, de enero del 2018 a la fecha se han logrado emitir 2417 resoluciones definitivas, solo 4 juicios quedaron en calidad de pendiente.
Este parámetro confirma que el trabajo del TJA es permanente aún sin contar con el presupuesto suficiente para la contratación de personal especializado.
El TJA se ha consolidado como el órgano jurisdiccional garante de loa derechos de los particulares frente a los actos, resoluciones u omisiones de carácter administrativos, emanados de las autoridades administrativas estatales, municipales o de sus organismos auxiliares.
En 2017 el TJA celebró 43 sesiones ordinarias y 7 extraordinarias. Cabe señalar que para tener un parámetro tan solo en ese año ingresaron al tribunal más de un millón de demandas.
En medio de estas estadísticas, diversos abogados del Foro Morelense, consideran que el Congreso del Estado, en específico la actual 53 legislatura local, debe abandonar sus intenciones de nombrar por la “vía rápida” a dos magistrados más del TJA, para colocar a incondicionales del actual gobierno que solo busquen el blindaje de la administración saliente que encabeza Graco Ramírez.