El caso de Enrique Camarena Salazar ‘Kiki’ Camarena se reabrirá por presuntas pruebas falsas del FBI, esto luego de que un juez federal ordenó retomar el juicio por el asesinato del agente de la DEA.
Con información de Milenio, el juez John A. Kronstadt determinó que el Buró Federal de Investigaciones (FBI) “presentó evidencias falsas que afectaron el proceso, lo cual implicaría volver a reunir evidencias y testigos”.
“Uno de los dos últimos sentenciados por el crimen Raúl López Álvarez, expolicía judicial de Guadalajara, -ciudad donde fue torturado y asesinado Camarena–, demostró que su proceso no fue realizado con apego a la ley, debido a una serie de irregularidades cometidas por personal técnico del FBI”, escribió Milenio.
El diario detalló que el juez federal enfatizó que a pesar de que las “imputaciones” quedaron anuladas, el expolicía de Guadalajara no podrá obtener la libertad bajo fianza y llevará un nuevo juicio desde una celda de prisión.
Agregó que el proceso deberá comenzar dentro de los 180 días posteriores a la publicación de la sentencia.
“Dado que el último juicio contra el acusado por los cuatro cargos (conspiración para asesinar y cargos de secuestro) antes mencionados ocurrió hace más de 34 años, el Gobierno (y muy probablemente el demandado) necesitará este tiempo adicional para ubicar testigos y pruebas debido al paso de un tiempo significativo. Esto quiere decir que los involucrados revivirán a partir de septiembre de este año la historia que los llevó a prisión o marcó sus vidas”, señaló el Juez.
Las sentencias de los acusados por el caso ‘Kiki’ Camarena se sustentaron en evidencias defectuosas
De acuerdo con Milenio, las sentencias que se dictaron en Estados Unidos contra los acusados por el asesinado de ‘Kiki’ Camarena se sustentaron en “evidencias que hoy se conoce fueron defectuosas”.
El juez federal señaló que el testimonio de Michael Malone, entonces jefe de la Unidad de Pelos y Fibras del Laboratorio de esa entidad de investigación, de que se encontró cabello de Camarena en estos lugares, no implicó directamente a Raúl López.
“Al ver la evidencia en el contexto de todo el expediente, el testimonio de Malone apoyó significativamente la inferencia de que las declaraciones de López Álvarez a Reynoso y Reyes García (un agente de la DEA y un testigo que lo inculparon) eran veraces y socavaron la defensa del peticionario de que estaba fanfarroneando o repitiendo lo que escuchó o leyó”, agregó el juez federal.
Finalmente, el exagente de la DEA y sus “subordinados”, como lo relata Milenio, realizaron análisis científicamente insostenibles en el lugar donde Camarena fue asesinado, una casa en la calle Lope de Vega de la capital tapatía.
“Pero además ofrecieron testimonios exagerados, todo lo cual incidió en una investigación que se ha mantenido activa durante más de tres décadas”, puntualizó.
Con Información de La Octava
