CUERNAVACA, MOR.- Habitantes de comunidades de los Altos de Morelos y Puebla, protestaron este lunes con bloqueos carreteros y movilizaciones, debido al incremento de las extorsiones, secuestros, homicidios y otros delitos graves en la región, y anunciaron que en caso no ser atendida la problemática, tomarán las armas para hacer justicia por su propia mano.
Los ciudadanos, provenientes de –al menos- 16 comunidades de siete municipios del estado de Morelos y Puebla, tomaron camino desde temprana hora rumbo a la ciudad de Cuautla y Cuernavaca; en el primer punto realizaron una protesta y bloquearon los accesos a esta ciudad, en tanto que otro grupo, se encaminó a la capital del estado de Morelos.
Los inconformes forman parte de comunidades de los municipios de Totolapan, Zacualpan de Amilpas, Tlayacapan, Ocuituco, Tetela del Volcán. Tlanepantla y Yautepec, así como de Alpanoca, Tepango y otras poblaciones del estado de Puebla, donde desde la semana pasada, algunos ciudadanos han instalado barricadas y puestos de control en la entrada de sus comunidades para supervisar quién entra y quien sale, confirmó José Antonio Hernández Vargas, ayudante municipal de Hueyapan, uno de los pueblos que montó autodefensas.
Al llegar a Cuautla, los habitantes pronunciaron un manifiesto que incluye sus demandas de mayor seguridad, mayor presencia policiaca, mejor coordinación entre autoridades estatales, gasto verdadero y eficiente del presupuesto de seguridad en sus municipios.
Durante la reunión previa al inicio del mitin, los inconformes señalaron que otro grupo se acercaría a Cuernavaca para continuar las protestas, sin embargo cambiaron la propuesta por la toma de la autopista México-Acapulco, en caso de que las autoridades no acudieran a su llamado.
Entre las exigencia incluye la instalación de puestos de revisión, la desaparición del Mando Único en la zona y el reconocimiento de la vigilancia comunitarios a través de Policías Comunitarios, el acceso total a las cámaras instaladas en la región y que controla la Comisión Estatal de Seguridad (CES), permiso para portar armas, entrega de equipo de radiocomunicación, vehículos para ser utilizados como patrullas, entre otras solicitudes.
“Resulta un verdadero infierno subsistir; vivimos con miedo constante de no saber si vamos a regresar a nuestras casas, y si al volver a ellas no las vamos a encontrar vacías”, refiere el texto leído ante los ciudadanos por un habitante que solicitó no ser identificado, por lo que se impidió a los medios ser grabado y fotografiado el rostro.
“Nos preocupa que nuestros jóvenes sean agredidos y obligados a caer en las drogas o enfilarse a las filas de la delincuencia”, destaca el documento firmado por las comunidades, adheridas también al denominado Consejo de Pueblos de Morelos (CPM).