CUERNAVACA, MOR (David Monroy). – El presidente de la comisión de Seguridad Pública, Jorge Ramos Hernández, consideró que a Morelos “le urge” un replanteamiento de su sistema de seguridad, pues a pesar de los esfuerzos, la incidencia delictiva se mantiene y los delitos de alto impacto muestran un repunte.
El también ex presidente municipal de Tijuana, ciudad que en su momento fue considerada la ciudad más peligrosa del mundo junto con Bagdad (en Irak), por sus altos índices de violencia, recomendó a las autoridades de Morelos revisar la forma en que se quiere combatir el delito o acabar con la impunidad.
Ramos quien fue el gobernante tijuanense que combatió a los grupos criminales a partir de 2010, e impuso a un dirigente social y activista como secretario de Seguridad: Alberto Capella Ibarra, actualmente titular de la Comisión Estatal de Seguridad de Morelos, aseveró que sin participación y unidad social, no se puede combatir el crimen.
Ramos acudió a Cuernavaca a dictar una conferencia sobre seguridad y Mando Policiaco coordinado a invitación del panismo local y del vice presidente de la cámara de Diputados, Javier Bolaños Guilar, quien a su vez, es diputado Federal por la capital del estsdo de Morelos.
“Yo no conozco a un sólo héroe de la seguridad que por si solo haya logrado resultados (suficientes). Es un trabajo de unidad y de conjunto”, puntualizó al destacar que el caso Morelos requiere de atención inmediata porque los números indican que ni el Mando Único ni la Policía Morelos están dando los resultados esperados.
Explicó que el florecimiento e incremento de la delincuencia organizada y los crímenes de alto impacto, no cesarán en Morelos mientras persista la falta de unidad entre los sectores, actores y partidos políticos, y la autoridad no genere confianza en la población, sobre todo en lo que a mandos policiscos y elementos se refiere, aseguró el presidente de la comisión de seguridad pública de la Cámara de diputados del Congreso de la Unión.
Ramos añadió que datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) y del INEGI refieren que la percepción de corrupcion en la policia, y de desconfianza de la población en las autoridades, es mucho mayor que la medía Nacional, en tanto que los delitos de alto impacto, si bien han tenido oscilaciones, no han desaparecido o mejorado, ya que la estadística demuestra que todos los delitos han subido de 2010 a la fecha.
“La primera debilidad de Morelos, es la división y la falta de unidad (sic). El mejor clima de inseguridad es una sociedad dividida, no sólo en el ámbito político sino también en el social. No hay un sólo proyecto, no hay una sola visión de ciudad, de estado, eso es clave. Ganarle así al crimen es una empresa muy difícil”, apuntó.